Los Arribistas. Fragmento de Mitos y fantasías de la clase media en México (Gabriel Careaga)

Los arribistas 

"Son los miembros más sobresalientes de la nueva expresión del desarrollo capitalista de la clase media en la sociedad mexicana. Se sienten muy cerca de la burguesía. Tratan de imitarla. Vivir como sueñan que viven y teniendo sólo una aspiración en la vida: hacer dinero. Se educaron en el estilo social que responde a la idea del éxito en función de la riqueza y de la salvación personal. Tienen una edad promedio entre 20 y 35 años de edad. 

Se educaron dentro de toda la tradición de la cultura norteamericana del éxito y la riqueza; de consumo y de feroz individualismo. Tienen una intensa necesidad de obtener identidad y de demostrar que son hombres de brillante porvenir. Son hombres y mujeres que leyeron de forma obsesiva libros como el de Como ganar amigos e influir en las personas.

Cuando discuten y hablan, raramente, de algo que no sea su estrechísimo mundo de cómo hacer dinero, reduce todo a una filosofía empirista y hedonista. Son profundamente conservadores y reprimidos. Siempre estará buscando prestigio, comodidad, seguridad y bienestar. 

Siempre están hablando de lo mucho que ganarán en los próximos negocios que llevaran a cabo y que en menos de dos años los harán ricos. Son unos eternos soñadores del mundo de la riqueza y el consumo. 

Siempre están tratando de aparentar, de pretender, de ser equilibrados, de ir a fiestas decentes, de vestir bien, de ser refinados, saber de comidas y vinos. Son gregarios y están en contra del pensamiento crítico. Desean grandes cosas, grandes hechos, pero prefieren la seguridad de su posición que el riesgo. Su ideología política es reaccionaria y se opone a cualquier cambio que ponga en peligro su estabilidad.

Está desesperado por la aventura y el hecho insólito diario; exige que le pasen cosas importantes. 

Piensa que el camino al éxito debe ser acompañada de una personalidad autoritaria y tener sensación de poder e identidad. Busca ser confiado, atractivo, culto, emprendedor, enérgico, entretenido, popular y sociable.

Los viajes les hacen sentir importantes y les dan un aire de cosmopolitismo porque saben hablar inglés y porque vieron cosas en la “metrópoli que en México nunca tendremos”. Su estructura de personalidad depende de estilo de vida norteamericano. 

Adoran Estados Unidos. 

Es el hombre que está integrado en la iniciativa privada, que maneja clichés e ideas obsoletas sobre el mundo que les tocó vivir, pero que no encuentra ni la salvación personal ni social en esos delirios que día a día se van convirtiendo en pesadillas monstruosas." 

Fragmentos del capítulo VI. Débiles y poderosos

Mitos y fantasías de la clase media en México

Gabriel Careaga

Primera edición 1974