Frases de Días y noches de amor y guerra (Eduardo Galeano)
1.- Las cosas me acompañan y se van, las tengo de noche, las pierdo de día. No estoy preso de las
cosas; ellas no deciden nada.
2.-Fiebre de mis adentros: las ciudades y la gente,
desprendidos de la memoria, navegan hacia mí: tierra donde nací, hijos que hice,
hombres y mujeres que me aumentaron el alma.
3.-¿Cuántos hombres serán arrancados de sus casas esta noche?
5.-Cada una de mis mitades no podrá existir sin la otra. ¿se
puede amar la intemperie sin odiar la jaula? ¿vivir sin morir, nacer sin matar?
en mi pecho, plaza de toros, pelean la libertad y el miedo.
6.-Quien crea que la patria es una casa de todos, será hijo de
nadie.
7.-Hacía pocos años que yo había perdido a Dios. Se me había roto el espejo. Dios tenía los rasgos
que yo le ponía y decía las palabras que yo esperaba. Mientras fui niño, me
puso a salvo de la duda y de la muerte. Había perdido a Dios y no me reconocía
en los demás.
8.-Dos por tres me olvido, y regalo a la tristeza esta vida de
yapa, me dejo expulsar del Paraíso, dos por tres, por ese Dios castigador que
no termina de irse de adentro de uno.
9.-El dolor era tanto que no cabía en mi nadie más que el
dolor, y simplemente me quería morir porque la muerte dolía menos.
10.-Ahora morirme hubiera sido un error. Yo quería dar todo
antes de que la muerte llegase, quedarme vacío, para que la hija de puta no
encontrara nada que llevarse.
11.-Yo era cazador de palabras, esa iba a ser la manera de
estar con los demás después de muerto.
12.-No vivió para el triunfo, sino para la pelea.
13.-En el sistema, estar vivo es un peligro; pensar, un pecado;
comer, un milagro.
14.--La Máquina enseña a aceptar el horror como se acepta el frío en el invierno.
15.- Dios no vive porque no puede morir. Por eso Dios no te
conoce ni te ama.
16.-La Máquina te amaestra para el egoísmo y la mentira. La
solidaridad es un delito. Para salvarte, enseña la Maquina, tenéis que hacerte
hipócrita y jodedor... ¿No es el prójimo un competidor y un enemigo?
17.-En la universidad, toda ilusión está permitida, pero en la
realidad no es posible.
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18.-La prosperidad de pocos maldice a todos los demás.
19.-¿cuántas veces he sido un dictador? ¿cuántas veces un
inquisidor, un censor, un carcelero? ¿cuántas veces he prohibido, ¿a quienes más
quería, la libertad y la palabra? ¿de cuantas personas me he sentido dueño? ¿a cuántas he condenado porque cometieron el delito de no ser yo? ¿Quien está a
salvo de confundir a un hermano con un rival y a la mujer que se ama con la
propia sombra?
20.- A veces, se me da por sentir que la alegría es un delito
de alta traición, y que soy culpable del privilegio de seguir vivo y libre.
21.-Estar vivo es un pequeña victoria.
22.-Requiere más coraje la alegría que la pena. A la pena, al
fin y al cabo, estamos acostumbrados.
23.- Comer solo es una obligación del cuerpo. Contigo, es una
misa y una risa.
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